El doctor Domenico alnibár Miller , especializado en Cirugía Plástica y reparador de la piel, en la Universidad Santa Cecilia de Santos en Sao Paulo, Brasil, nos explica , los tipos de quemaduras que se pueden presentar en los niños y como clasificarlas.
Quemaduras de primer grado : Esta es una lesión leve, que se caracteriza por un eritema, o enrojecimiento de la piel. Puede causar mucho ardor y dolor, generalmente ataca la parte mas superficial de la piel, llamada Epidermis. Esta quemadura no reviste mayor gravedad y se puede tratar en casa. Se produce generalmente al tener contacto con agua tibia, vapor caliente, y exposición continua y sin protección al sol. Es recomendable tratar la parte afectada con pomada a base de vaselina que humectan y lubrican la piel . También se puede aplicar compresas frías para aliviar el dolor. Estas quemaduras no tienen muchas alteraciones significativas en la piel, pero requiere de cuidados locales constantes. Es muy importante mantener vigilado al niño para que no se toque el área y esta se infecte.
Quemaduras de segundo grado : Es aquella que afecta la Epidermis y parte de la Dermis, y se caracteriza porque forma en la piel Flictenas (burbujas de agua) y es indispensable llevar inmediatamente al niño al hospital, esta se produce por el contacto con líquidos a altas temperaturas. Al área afectada se le debe hacer un hebridamiento o limpieza de la piel, y se recomienda cubrir la quemadura, para evitar que la piel pierda su humedad natural y se infecte. Es indispensable la curación diaria con cremas, gasas y vendajes para evitar que el niño tenga contacto directo y se lastime mas. Los hospitales proveen camas y cunitas especiales para estos casos, las cuales tienen fácil acceso por la enfermera para manipular el cuerpecito del niño, el colchón generalmente es blando para no ejercer presión sobre la quemadura y lastimar mas al niño. Es recomendable usar cremas que contengan Sulfadiacina de Plata, la cual evita la infección y penetra bien en el tejido facilitando la cicatrización.
Quemaduras de tercer grado : Es una quemadura muy profunda, compromete todas las capas de la piel; la epidermis, toda la dermis, el tejido celular subcutáneo, el músculo y el hueso. El niño requiere de hospitalización inmediata, el aspecto de la quemadura es blanco y esta quemadura puede provocar lesiones deformantes y generalmente hay necesidad de procedimientos quirúrgicos, como injertos para reparar la piel. Al haber debridamiento mayor del área afectada es necesario realizar un injerto. Estas quemaduras son casi siempre producidas por factores eléctricos y térmicos. Es necesario tratar al niño reponiendo los líquidos corporales del cuerpo por vía indovenosa, además de antibióticos y analgésicos para aliviar el dolor y evitar infecciones. Es recomendable sedar al niño para evitar molestias y dolor durante la curación. Las quemaduras de tercer grado generalmente dejan secuelas que sin el debido cuidado su resultado es deformidad y en casos extremos llevar a los niños a la muerte. Las quemaduras eléctricas son generalmente de tercer grado, ya que la corriente eléctrica entra al cuerpo y se extiende en el tejido. Si el niño esta de pie se convierte en un polo a tierra y la energía sale, de lo contrario se expande sobre la piel quemando también alrededor. Esta quemadura generalmente es blanca y produce necrosis de la piel. Finalmente, cuando la quemadura afecte cara, manos, pies o genitales, sea cual sea su grado, es necesario llevar al niño al hospital, ya que son áreas delicadas y de atención inmediata evitando secuelas tardías y que invaliden al niño.
Prevención :
•Es fundamental tener en casa extinguidores preferiblemente en diferentes partes, estos deben ser de tipo ABC los cuales sirven para: A-madera, papel B-Químicos y grasas C-Electricidad.
•Enseñar al niño 2 posibles rutas de evacuación en caso de incendio.
•Asignar un sitio especifico de encuentro fuera de la casa en caso de incendio y hacerle saber al niño que por ningún motivo debe volver a entrar en casa cuando hay fuego.
•Enseñar al niño a rodar en el prado si su ropa ha cogido fuego para apagarlo.
•No dejar nunca a los niños solos en la bañera, ni dejarlos manipular las llaves del agua.
•Hacer graduar el calentador de agua de manera que esta no salga demasiado caliente.
•No dejar la plancha enfriar nunca sobre la mesa ni en el closet, siempre es recomendable ponerla en el baño , sobre el piso de cerámica o baldosín.
•Debemos enseñar al niño que cuando haya fuego debe salir cubriendo con sus manitas el área de los ojos, pero permitiendo la visibilidad.
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